jueves, 14 de abril de 2011

Nuevos retos para el sector del vino: conseguir que nuestros vinos compitan con los franceses en los mercados exóticos.

De Gumiel del Mercado (Burgos) a Shangai hay una distancia de 10.168 kilometros. Carolina y Yolanda García Viadero, hermanas y propietarias de Bodegas y Viñedos Valduero, han recorrido este largo camino. Llevar sus botellas y su marca a los mercados más exóticos no ha sido sencillo. Por el sendero se han topado con diferencias culturales, distintos paladares e impedimentos burocráticos, pero los números hablan por sí solos. Están en China, La India, Vietnam, Australia, Brasil, México...y su previsión más conservadora es contar con un aumento de la facturación del 10% para este año. 
Al frente de una bodega familiar, Carolina y Yolanda han conseguido especializarse en un segmento de vino con status de lujo y ahora buscan equipararse a los caldos franceses en los mercados internacionales.  De momento, exportan casi un 60% de su producción anual, que asciende a un millón y medio de botellas. Su producto estrella, Valduero Gran Reserva de 2001, que está calificado con 91 puntos por la guía Robert Parker.
Su estrategia es sencilla. “Nuestro reto es competir con vinos franceses porque están muy bien considerados y para eso apostamos por buscar socios locales”, explica Carolina. Con esta filosofía han ampliado su mercado a China, Vietnam, Singapur y han dado los primeros pasos en la India, donde esperar llegar a Bombay en un plazo de seis meses. Con respecto al mercado chino tienen grandes expectativas, especialmente en la zona del Tibet: "Es muy industrial y tiene un gran potencial comercial que aún no se ha explota", señala la bodeguera. 
Se trata de posicionar la marca a un nivel alto para hacer frente a Borgoñas y Burdeos, vinos que han conquistado los paladares más exigentes en Asia y otros mercados internacionales. “Creemos que nuestras botellas tienen que estar por todas partes y al mismo precio, que en nuestra opinión es un gran precio en relación con la calidad”. 
Sin embargo, esta tarea no siempre depende de su gestión, ya que hay países como India, Brasil y Singapur donde las botellas soportan un gravamen de hasta el 300%, "aunque se compensa porque son países donde existe una parte de la población con un gran poder adquisitivo", matiza.
"Ahora mismo, donde encuentras más satisfacciones es en los mercados emergentes. Brasil por ejemplo ha sido una gran sorpresa. Estamos teniendo incrementos de un 60 al 70% en nuestras exportaciones", señala Carolina, que recuerda que las exportaciones más tradicionales también reportan algunas alegrías. “EEUU ya está otra vez pegando fuerte. Es un mercado apasionado y entusiasta de los vinos de calidad y muy cosmopolita", indica.

Sus exportaciones llegan también a Jordania, Qatar y Abu Dhabi. En estos países, la estrategia posicionarse en Duty Free y en hoteles de gran prestigio como Sheranton y Hilton. "Es un mercado de posicionamiento de marca donde lo interesante no es el volumen sino estar ahí. Queremos que los transeúntes de estos lugares, que generalmente tienen un fuerte poder adquisitivo, vean nuestros vinos", señala.

Diversificación en casa
Estas dos bodegueras, que emprendieron su aventura vitivinícola hace 26 años junto a su padre, Gregorio García, no olvidan el mercado nacional. "Nos da mucho respeto e ilusión estar bien posicionados en el mercado nacional. Nos hemos especializado en reservas y pese a la saturación del mercado, nuestro vino Gran Reserva Valduero 2001 tiene tal demanda que tenemos que suministrarlo por cupos", cuenta con orgullo Carolina. 
Aquí han optado por diversificar sus bodegas a otras denominaciones de origen como Toro y Rioja, en las que insisten en producir vinos "elegantes y de alta calidad". Por el momento, el balance es positivo y pueden afirmar que son "una bodega sólida en la selva financiera del mundo del vino". 
14/04/2011  Covadonga García www.cotizalia.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario